Cree En Tu Milagro

Ahora, vas a librarte de todos tus males. Llegó la hora de acabar con los problemas. Ellos no nacieron contigo, no te pertenecen. No te preocupes en como hallarás la solución. Invoca a la Sabiduría Infinita que habita en tu interior, ella conoce la solución.
Recuerda que el recibir depende del pedir, si tu pides, recibes, sea lo que fuere.
Dentro de ti, existe el poder curador. Haz estallar la energía de la salud que habita en ti. Comienza ahora a accionar las fuerzas energéticas de la salud a través de tu palabra, de tu pensamiento, de tu oración.
Lo que tu piensas ya está existiendo. Lo que existe no es solo lo que ven tus ojos. Lo que tu creas en tu dimensión mental también existe. La diferencia es que no lo ves. Si tu visualizas un sol divino que ilumina tu corazón, que está fallando, esa luz divina estará iluminando, rehaciendo, recreando, reactivando los tejidos y las válvulas de tu corazón.
Toda hora es hora de empezar.
No hay porque estar rumiando el pasado ni porque preocuparse por el futuro. El futuro es la cosecha del presente. Todo lo que tienes que hacer es ser feliz hoy, es crear en tu mente a cada instante tu felicidad, tu bienestar, la alegría de vivir. No sigas cargando pesos que no existen, tampoco caviles demasiado sobre el futuro que tampoco existe. ¿Porqué desperdiciar tu energía?...

1) ¿Qué es lo que tu quieres?...Haz una oración basada en lo que tu quieres (en presente y como si ya estuviera realizado) Ej: Gracias Señor por haberme concedido la gracia de...
2) es necesario que lo desees realmente, que sientas una enorme necesidad y que te cause inmenso placer ( fuerza, poder, energía), luego es un pedido poderoso que llega al cielo.
3) Ten fe. Es necesario creer en el poder infinito de tu subconsciente, que transforma tu pensamiento en realidad física. No importa lo que pidas, debes creer que Dios en ti atiende tu oración bien hecha. La oración es una ley. Cuando tu pones las premisas correctamente, el resultado nunca falla.
4) Pide con claridad, define, especifica.
5) No retrocedas, no vuelvas a la situación negativa, no pienses en tus males y en tus sufrimientos.
6) Agradece (si comenzaste la oración como está indicado, ya lo has hecho).
Esta es tu obra se salvación, de liberación. Bienaventurado eres porque tendrás la seguridad absoluta que un nuevo mundo comienza a nacer en tu vida. El mundo eres tu. Dios está en ti. Y el poder es tuyo.
Dios te bendiga

Prof. Alicia Pianca
Tel.: 4858-1703
alicialpianca@yahoo.com.ar