Sanación Cristica
Todos alguna vez hemos tenido por lo menos una experiencia, en la que sentimos Amor. ¿Cómo es? ¿Como era? ¿La recuerdas? Revívela, siéntela de nuevo. Es el Cristo irradiando su energía de Amor. Recordamos que el Cristo es la luz que contiene todas las cualidades de Dios y está ubicada dentro de tu corazón, dentro del corazón de todos. Es la Presencia del Padre, en cada uno de nosotros.
En estás Fiestas te invito a unirte a tu Cristo, a abrirte al Amor y así a encontrarnos con el otro desde el Alma. Entonces…
…Cuando una persona se ubica frente a ti para hablarte, escúchalo atentamente, míralo a los ojos, si es posible, intenta interesarte por su mensaje, aprecia lo que tiene para decirte, puedes mirarlo con ternura, imaginando que es un niño pequeño, deja que el encuentro fluya, entrégate al momento. Observa el resultado: “Sentirás la Bendición de Dios”.
…Saluda siempre, aunque el otro no responda, no dejes de saludar, su yo Superior te lo agradecerá y “Sentirás la Bendición de Dios”.
…Regala algo con intención amorosa, es importante la vibración, no el material. La energía del Amor llegará directo al corazón y tú “Sentirás la Bendición de Dios”
…Si él está callado inicia la conversación preguntándole cómo está, como se siente, cómo marchan sus asuntos. Comparte tu propia experiencia, sin temor, cuéntale aunque tengas unas reservas. Envíale buenos deseos cuando las palabras deben guardarse. Y siempre “Sentirás la Bendición de Dios”
…Si puedes tócalo, si puedes acarícialo, ¡abrázalo! ¡Bésalo! ¡Dile que lo amas! Y tu”Sentirás la Bendicen de Dios”.
…Hazle saber lo bueno y lo bello que viste en él, con veracidad, no para congraciarte y tú “Sentirás la Bendición de Dios”.
…Permítele expresarse libremente, observa, valora su expresión él tiene algo único y hermoso que sólo él puede manifestar de ese modo, y tú “Sentirás la Bendición de Dios”.
…Míralo otro vez y recuerda que esa persona, que está frente a ti, es un alma, como vos, experimentando su Ser y que los dos se encuentran en el Amor.
Damos Amor y Recibimos Amor, así nos sumergimos en el Corazón de Dios.
“Que en está Navidad, despierten los Cristos de toda la humanidad2 y…”Sentiremos la Bendición de Dios”.
Con el Amor de Cristo
Sandra Petruccelli.